Por: Hospital Shriners para Niños - México*
- “Las niñas, niños y adolescentes con discapacidad se encuentran entre los grupos más vulnerables ante el bullying.
En México existen aproximadamente 40 millones de niños entre los 6 y 14 años y se estima que más del 50% han reportado haber sido afectados por prácticas de bullying, de acuerdo con las cifras de la UNESCO y de la organización no gubernamental (ONG) Bullying Sin Fronteras México, colocando a México en el primer lugar a nivel mundial de este tipo de violencia que generalmente ocurre en los espacios escolares, aunque no sólo en éstos.
De acuerdo con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) “Las niñas, niños y adolescentes con discapacidad se encuentran entre los grupos más desfavorecidos e invisibilizados en todo el mundo”, ya que al estar marginados del desarrollo se intensifica su estado de vulnerabilidad y, en comparación con sus pares sin discapacidad, tienen más probabilidades de experimentar las consecuencias de la inequidad social, económica y cultural.

El Hospital Shriners comparte, de la mano de la psicóloga titular, Mariana Pinada, información sobre el bullying en niños y niñas con discapacidad, cómo tratarlo y prevenirlo. Pinada señala que es importante reconocer el bullying como un problema discriminatorio, debido a que el acosador “elige” a las víctimas según características tales como la etnia, clase social, género, orientación sexual, morfología corporal, discapacidades o diversidad funcional.
En el caso específico del bullying contra personas con discapacidad intelectual (relacionada con una condición neurológica, por ejemplo) el acosador se vale de las dificultades en la comprensión de las habilidades sociales de la víctima.
Niños y niñas con trastorno del espectro autista, así como aquellos con discapacidad intelectual son los más vulnerados; si bien los niños con discapacidades físicas son altamente propensos a sufrir acoso, puede ser que tengan algunas habilidades para evadir a sus acosadores, previniendo que las agresiones vayan en aumento.
¿Cómo puedo detectar si mi hijo o hija está siendo acosado? Observándoles puedes notar:
- Si el niño o niña se aísla o no se relaciona como normalmente lo hacía.
- Comienza a manifestar enfermedades psicosomáticas tales como el dolor de estomago o de cabeza.
- Pone excusas para no ir al colegio.
- Cambia su carácter o personalidad.
- Camba la forma de vestir en búsqueda de ocultarse en las prendas.
- Vuelve de la escuela sin su material de trabajo o sus pertenencias se encuentran dañadas.
- Evita el contacto visual.
- Cambia de postura ocultando el rostro o encorvándose como mecanismo para pasar desapercibido.

¿Qué puedo hacer si detecto una situación de Bullying?
- Escuchar atentamente al hijo o hija
- Observar su comportamiento.
- Mantener la calma y no sobre reaccionar / Sobre proteger, ya que esta acción aumentará la sensación de falta de habilidades y disminuirá su autoestima. Además de que una actitud desafiante y exigente podría orillar a que el niño se intimide, propiciando que este pierda confianza para contar su situación.
- Buscar el apoyo de las autoridades del centro escolar.
- Reforzar su autoestima.
- Liberarlo del sentimiento de culpa explicando que él o ella no es el problema si no el acosador.
- Dar oportunidad de ampliar su circulo social mediante nuevas actividades extracurriculares.
- Explicar a nuestros niños que ante estos hechos no debe responderse con agresiones.
- Consultar con el o la niña las acciones a seguir, respetando sus opiniones y decisiones, en caso de que rechace las opciones que se le presenten, indagar en el motivo de su rechazo.
Otros datos:
Consideraremos al acoso como el comportamiento agresivo en el que una persona de forma intencional y repetidamente causa lesiones o malestar a otra, con la finalidad de humillar y de establecer una posición de superioridad dejando vulnerable y en desventaja al acosado, ya que típicamente este tiene dificultad para defenderse. El bullying es una serie de acciones que avanzan de forma paulatina por parte del acosador que van desde:
- Ofensas Verbales (uso de insultos, apodos, burlas sobre los aspectos físicos).
- Sometimiento e intimidación.
- Mensajes de advertencia (amenazas).
- Marginación social del acosado (por parte del acosador y los actores indirectos, es decir que ignoran o discriminan de manera deliberada).
- Agresión física (podemos incluir robo o daño a las pertenencias del acosado o golpes directos a la víctima).
*Acerca del Hospital Shriners para Niños – México
El Hospital Shriners para Niños de México fue establecido en México en marzo de 1945 ofreciendo atención médica para niños de 0 a 18, años, con tecnología de vanguardia, y personal médico altamente capacitado al servicio de los niños mexicanos. Conoce más en:
https://www.shrinershospitalsforchildren.org/mexico-city
